La bodega emblemática de la familia Eguren, dedicada de forma exclusiva al tinto San Vicente, después de que sus viejos muros han alojado en distintas etapas a otros vinos de la casa. La construcción de la bodega de Páganos la liberó de esas tareas y ahora es el centro social del grupo y también el hogar de Guillermo Eguren. Se cumple plenamente el principio fundacional de la firma: un viñedo, una variedad, una bodega, un vino.
Los muros de piedra caliza, la estructura de madera, la conservación de los viejos toneles y lagares y hasta la decoración del salón social dan al conjunto un aire clásico que se desmiente en cuanto se contempla la disposición de las flamantes barricas de roble en el calado de la bodega. Y, sobre todo, cuando se accede al vino, un tinto innovador y hasta rebelde que abrió caminos nuevos y hoy es todo un clásico en la vanguardia del vino de Rioja.
